En un presente donde la música se vuelve cada vez más personal y autorreferencial, una de las voces emergentes del país comparte cómo fue moldeando su sonido, sus inspiraciones y el motor emocional detrás de su nuevo proyecto. Con honestidad y una mirada profunda sobre su propio recorrido, la cantante revela una evolución marcada por la madurez artística y la autenticidad.

Un estilo en constante transformación

“Mi estilo fue cambiando a medida que fui creciendo como persona y como artista”, cuenta. Sus inicios estuvieron ligados a lo melódico, a la emoción pura, a ese impulso expresivo que nace desde lo más íntimo.
Con el paso de los años, esa sensibilidad inicial encontró un equilibrio entre lo pasional y lo introspectivo. “Hoy tengo un sonido más sólido, más propio, con influencias de lo latino, lo pop y ese toque dramático que siempre me acompañó”.
Su identidad actual combina fuerza, vulnerabilidad y una autenticidad que la define: “Me animé a colores nuevos, a canciones que me desafiaban y a mostrar mi historia con más libertad.”

Vivencias que se transforman en canciones

Para esta nueva etapa, la artista confiesa que su música está profundamente atravesada por experiencias personales que la marcaron. “Mi música hoy está marcada por mis vivencias: la familia, las luchas, las pérdidas, el amor y las renacidas”.
A esto se suman influencias poderosas: desde Mon Laferte, Lady Gaga o Demi Lovato, hasta Shakira, María Becerra, Jimena Barón y referentes históricas como Ella Fitzgerald, Etta James o Madonna.
“Soy una mezcla de lo que escuché toda la vida y de lo que siento hoy. Todo eso terminó formando un sonido que siento muy mío.”

Cuando la emoción es punto de partida

A diferencia de muchos artistas que parten de una melodía o de una letra, ella reconoce que su proceso creativo nace desde un lugar más visceral: la emoción.
“Siempre empieza por algo que me late fuerte adentro. Desde ahí aparece una melodía y recién después llegan las palabras. Es como si la canción ya existiera y yo la tuviera que descubrir”.
En medio de una rutina intensa —entre números, clases de canto y computadoras— continúa componiendo y buscando colaboraciones: “Mientras hago covers también estoy buscando a alguien que conecte con mi voz y quiera componer conmigo.”

Desafíos de la industria: de la lucha a la oportunidad

Con la sinceridad que la caracteriza, la artista admite que abrirse paso en la industria no es fácil. “El mayor desafío es hacerse visible entre tantos artistas”.
Sin embargo, lejos de frenarse, convierte esa dificultad en motor. “Me impulsa a profesionalizarme, a crear contenido, a mejorar cada día y a mostrar mi voz con más seguridad”.
Las redes sociales, que para muchos son un obstáculo, para ella se volvieron una herramienta de expansión: “Son una oportunidad para llegar a gente que antes ni imaginaba. Estoy construyendo mi camino a mi ritmo, pero con mucha constancia.”

Un mensaje que quiere dejar en su público

Al preguntarle qué espera generar en quienes la escuchan, lo resume en una frase que sintetiza su esencia:
“Quiero que sientan algo real.”
Busca emoción, conexión, recuerdos. Que su música abrace. Que su voz acompañe. Y que, en vivo, la energía se multiplique: “Que salgan con la sensación de que algo les llegó al corazón.”

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EMANUEL MERCADO