Lucas Camelino logró ayudar a miles de personas gracias al coaching y hoy tiene una organización donde transforma vidas.
Por: Carolina De Luca.
En los últimos años el crecimiento del coaching ha sido exponencial. Lucas Camelino comenzó a ser coach, porque buscaba un cambio en su vida, pero no solo pudo cambiar su realidad sino también la de miles de personas más. Hoy tiene una organización donde transforma muchas vidas y los ayuda a alcanzar sus metas.
ZOE Coaching es considerada una de las mejores escuelas de Liderazgo y Coaching. Cuenta con más de 8000 estudiantes, acreditados en 17 países. Lucas ingresó a ZOE buscando herramientas para poder crecer aun más en el mundo del coaching y alcanzar a más personas.
—¿Cómo empezaste a estudiar coaching ontológico?
—Empecé a estudiar coaching ontológico buscando algo diferente, cambiar mi vida, sentía que mi vida estaba estancada, que sin un título no era nada. Tenía mi profesión como vendedor, más de 20 años trabajando, vendiendo para un montón de empresas y estaba buscando una nueva oportunidad, educarme, tener un título para que el mundo me vea distinto.
—¿Qué es y para qué sirve el coaching?
—El coaching lo que hace es verte. Primero te prepara en todos los estados, te hace revisar tu ser, tu forma de ver la vida, tu forma de comportarte ante situaciones, te hace salir de la víctima para hacerte en protagonista, te hace pulir y sacar el liderazgo que tenes dentro. Todos tenemos un líder adentro que muchas veces está opacado por todo el contexto en el que vivimos, entonces el coaching sirve para gestionar emociones, para tomar decisiones. Todas las personas que empiezan a estudiar coaching primero empiezan a preguntarse si realmente lo que están haciendo los hace felices o no, si están cumpliendo sueños, metas.
—¿Cómo repercutió la pandemia a nivel profesional?
—La pandemia a nivel profesional me potenció al mil. Todas las personas estaban mal emocionalmente y necesitaban una asistencia, me incluyo también a mi. Cuando empecé a darme cuenta que tenía las herramientas suficientes para poder ayudar a esas personas en esas emociones que los ataban, esas depresiones que generó este encierro, el no poder dar un abrazo, un beso a familiares queridos por miedo, hizo que mi profesión se potencie y pude ayudar a más personas. Hoy tengo una organización de más de 1000 personas, donde loe he ayudado y he transformado vidas.
—¿Cuándo ingresaste a ZOE y qué significa profesional y personalmente para vos?
—ZOE fue un antes y un después. Entré en marzo de este año y sinceramente me cambió absolutamente todo. Me cambió a nivel personal, me dio herramientas en lo profesional. Si bien yo era coach cuando llegue a ZOE, no podía monetizar todos mis conocimientos, ni tampoco ayudar a todas aquellas personas que pude hacer luego de entrar a ZOE, porque trabaje mucho en la parte espiritual, me hizo dar cuenta que sí tenia las herramientas y las condiciones para ser un conferencista a nivel mundial, que era lo que yo deseaba. ZOE me generó todas esas posibilidades que antes no veía. En lo económico me potenció, cambió mi realidad y pude cambiar la de toda mi familia y mi entorno.
—¿Cuáles son tus proyectos a futuro?
—Impactar un millón de vidas a través del coaching, a través de las conferencias. Quiero tocar vidas, devolverles a las personas ese fuego que perdieron o que tienen guardado. Me considero un despertador de sueños, de vidas y de gente que hoy está dormida.